Nos decidimos por la ruta de la colina de la luna, o la Moon Hill. Aquellos que saben dicen que lo mejor es hacer una ruta en bici por Yangshuo y perderse con ella. ¡Y eso es lo que hicimos! (sin querer, claro...)
Eran las ocho de la mañana cuando el autobús llegaba a la estación. Somnolientas y desconcertadas justo pisábamos tierra cuando un joven, que acababa de bajarse de una moto, entabló conversación con nosotras. Hablaba inglés, de forma fluida, y nos contaba historias que apenas escuchábamos. Sacó una libreta y nos enseñó notas, apuntes y comentarios de otras personas que él había conocido.
El amable chico nos quería llevar a un hotel, enseñarnos la ciudad y muchas cosas más. Nosotras, ni siquiera sabíamos dónde estaba nuestro hostal.
Dejamos al chico, éramos las únicas turistas y todo el mundo lo sabía. Nos miraban de arriba abajo, nos ofrecían servicios que ni siquiera entendíamos y nosotras, ¡nosotras necesitábamos un respiro!.
Si algo nos había quedado claro de los mil blogs que habíamos leído, era que fiarse de un chino que te hablaba inglés iniciando la conversación no era la mejor opción.
El mapa, la dirección, la reserva...todo lo teníamos a mano, pero necesitábamos tiempo. Un poco más alejadas de la estación, vimos que prácticamente estábamos a lado. Y nosotras sólo soñábamos con una cama...
Al despertar, hablámos con la chica de la recepción* y alquilamos unas bicis por 15 RMB al día. Nos dio un mapa y nos recomendó alguna ruta en bici por Yangshuo.
Sin dudarlo mucho cogimos la bici, primero andando ¡la ciudad era un caos!.Definitivamente, montar en bici no era menos peligroso que ir con ella de la mano. Las primeras pedaladas por la carretera no fueron sencillas. Los coches pasaban a apenas unos centímetros de tu lado, y cuando parecía que ya lo llevabas mejor una moto se cruzaba en tu camino o un coche salía de un lado y te impedía el paso. Todo eso cuando una moto, un coche o un camión no venía en dirección contraria directamente hacia ti.
¡Esa ciudad era un peligro!
Un peligro constante que se anunciaba entre pitidos. Porque si algo le gustaba a su gente era pitar... ¡no podía entenderlo!
Pero unos minutos después lo comprendimos todo. El pitido significaba " ey, voy detrás de ti y voy a adelantarte. NO TE MUEVAS NI UN MILÍMETRO."
Y era mejor hacerles caso, porque, efectivamente, 2 milímetros más allá de tu codo pasaba el autobús que te había pitado. Era la ciudad sin ley**.
Mirando las posibilidades de rutas en bici por Yangshuo, nos decidimos por la ruta de la colina de la luna, o la Moon Hill. Aquellos que hablan de Yangshuo dicen que lo mejor es coger una bici y perderse con ella.
¡Y eso es lo que hicimos! (sin querer, claro...)
Salimos del pueblo, en dirección correcta, y en vez de seguir recto al avistar el puente tal y como debíamos, apuradas con los camiones, la gente y los ruidos, tomamos la primera salida a la derecha...
¡Opción errónea! aunque placentera.
Entramos entonces en un camino desierto, tranquilo, que ofrecía unas vistas maravillosas para unas recién estrenadas en esas tierras.Cada tres pedaladas creíamos tener una perspectiva más bonita que la anterior (así que os podéis imaginar...¡parecíamos auténticas chinas con la cámara de fotos!)
Aquí, dos chinas haciéndose una autofotoLlegadas a un cruce (y mirando el mapa) llegamos a una conclusión: Nos habíamos equivocado.
Ahora estábamos tan lejos del Yangshuo como del pueblo siguiente. La decisión no era fácil (habíamos pedaleado alrededor de una hora y media) y aún teníamos que visitar la famosa Colina de la luna.
Decidimos volver por donde habíamos venido. Perderse estaba bien, pero no saber volver tampoco es ideal.
Intentamos coger unas Bamboo raft (barcas de bambú) pero no fue posible. Poco a poco llegaríamos a la conclusión de que las señoras que anuncian barcas de bambú están siempre ahí, excepto cuando se las necesita.
Ejemplo de cómo NO ir a la Colina de la LunaDespués de desandar lo andado, volvimos a estar en el puente causante del error. Ahora podíamos continuar hacia la colina de la Luna (continúa la historia aquí).
Las mismas chinas, cual turistas, compraron una corona de flores para adornarse la cabeza. Cuando vieron que no les cabía, se la pusieron a la bici...
* Es curioso que en todos los hostels que estuvimos el personal hablaba inglés (y duermes por unos 35 RMB la noche en habitación compartida). Normalmente son estudiantes universitarios que una vez finalizan la carrera montan su propio negocio. Suelen ser chinos viajados, con conocimientos de inglés y más abiertos que la mayoría. Sin embargo, es común que en los hoteles, incluso en los de alta gama, el personal no hable inglés.
** Todo el mundo dice que Yangshuo es un pueblo. Yangshuo tiene 300.000 habitantes. Un pueblo de 300.000 habitantes en mi pueblo, y en Navarra, es una ciudad ¡y grande!
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[…] merecido la pena. A las ocho de la mañana aproximadamente llegábamos a Yangshuo. Pero esa, esa ya es otra historia. By Danie|2015-12-01T15:24:43+00:00July 4th, 2013|Asia|4 […]
[…] tomado en razón al precio o a la comodidad, sin embargo la tomamos por la ciudad de destino. Por diferentes razones, preferíamos alojarnos en Yangshuo, además Guilin era una visita obligada para tomar el siguiente […]