La beca Erasmus está en boca de todos. Y, lamentablemente, no sólo por lo que es, una beca internacional con la que disfrutar probablemente de tu primera experiencia en el exterior, si no por el eterno debate sobre su recorte o no. Aquí 10 razones por las que hacer un Erasmus.

Como podéis imaginar, y como muchos ya sabéis, yo hice mi Erasmus en Stuttgart. Sin ir más lejos, el otro día os contaba 8 cosas me pasaron en Alemania para las que no estaba preparada.

El Erasmus siempre ha tenido su polémica y muchas veces me he visto en la tesitura de explicar por qué merece la pena que exista esta beca y por qué recomiendo tanto irse de Erasmus durante, al menos, seis meses. Entonces, a través de este blog me gustaría daros 10 razones por las que hacer un Erasmus.

1.- Superarás un gran reto personal

Atrás dejas a tus papás, a tus amigos de la infancia y de la universidad. Quizás ya has cambiado de casa y de ciudad al marcharte a la universidad, como me ocurrió a mí, pero aquí ya no los tendrás a 300 kilómetros, mucha de la comida a la que estás acostumbrado no existirá y por si fuera poco la gente a tu alrededor hablará raro...Vale... Mis platos no quedaban así... pero, ¿quién dijo que en Alemania existe el pescado?

2.- Aprenderás un idioma

Tus compañeros, tus profesores, la cajera, la que maneja tus cuentas en el banco y tu casero hablarán en ese idioma. Es una inmersión en estado puro. Todo muy  gracioso hasta que tengas que hacer tu primer examen (el mío parecía las hojas de apuntes del Dicciopinta). Además, mientras aprendes ese idioma mejorarás el inglés y el lenguaje de signos.

Esta soy yo intentando ingresar el dinero para el alquiler en el banco

 3.- Ganarás en tolerancia

Gracias a los dos puntos anteriores, comprenderás qué significa ser extranjero. Entonces serás tú el que emigra, el que no entiende cuando le hablan y, en ocasiones, al que le tocará recibir malos gestos de algún local que está harto de extranjeros como tú. Verte en esa situación hará que después, de vuelta en España, puedas comprender un poco más a aquellos que vienen a tu país en busca de una mejor situación. Comprenderás entonces que no te entiendan, que hagan "guetos" para mantenerse unidos entre ellos y que no sigan tus costumbres (¿acaso existe algún español erasmus que cene a las 6 de la tarde en Alemania?)

4.- Eliminarás de tu cabeza topicazos

Durante el Erasmus convivirás con personas de todos los países. Comprobarás como, a pesar de lo que piensas, los suecos y noruegos tienen un gran sentido del humor, a los indios les encanta conversar, los españoles no somos los más siesteros sino que nos ganan los chinos con sus siestas intermitentes e incontables en la biblioteca y los mexicanos no comen continuamente jalapeños y tabasco y beben tequila. Bueno, esto último sí que es verdad.

Chino común en una biblioteca

5.- Creerás que todo es más fácil

Verte con tantas dificultades para realizar tareas sencillas como la compra, asistir a las clases o incluso llamar a un taxi, hará que una vez vuelvas a España te sientas el rey del mundo. Nada se te resistirá, todo será tan fácil como hablar ¡en tu idioma! ¿Los examenes? ¡Te parecerán pan comido!

6.- Entenderás que un grupo cuanto mayor, mejor

Conocerás a mucha gente. Cada día conocerás a un nuevo erasmus, a un nuevo local o a alguien que lleva un tiempo en ese país.

Y todo el mundo es bienvenido al grupo que poco a poco se irá formando. Crearéis un grupo grande al cual todo el mundo está invitado. Por supuesto siempre se crearán grupos más pequeños, pero un erasmus nunca sobra con otros erasmus.

Esto tiene grandes ventajas y es que siempre tendrás a alguien con quien hacer un plan, con quien salir de fiesta o con quien hacerte un pequeño viaje.

7.- Harás grandes amigos

Seguramente, lo mejor que te llevarás de esta experiencia.

De ese grupo enorme que son los Erasmus destacarán algunas personitas. Conocidos que, poco a poco, pasarán a ser amigos para terminar siendo indispensables durante tu experiencia.

Además, estos amigos serán sin duda posibles futuros contactos para el ámbito laboral.

Personalmente, conocí en mi Erasmus a GRANDES amigos.

8.- ¡Alojamiento gratis!

¡A quién vamos a engañar! Sé que muchos estábais pensando esto desde un principio... Y es que parte de lo bueno de conocer a grandes personas ¡es que esas personas no viven en tu ciudad! Allí donde tienes un amigo, tienes una casa ¿no?

9.- Perderás el miedo a viajar

¡Si es que sabes lo que es eso! El erasmus es una gran oportunidad para tener alguien con quien viajar y encontrar vuelos baratos con los que ir a ver un poquito más de mundo. Los horarios no suelen ser intensos, y una clase (de la que no entiendes prácticamente nada) es mucho más fácil de saltártela, sin tener remordimientos, que en España.

10.- Valorarás más lo que tienes en España

Estando de Erasmus valorarás pequeños grandes detalles con los que cuentas en España. El primero, y más importante, es la familia. Hablar por Skype está muy bien, no oir que ordenes tu habitación también, pero ¿cómo se da un abrazo por skype?

Típica estampa "erasmusiana"

¿Y la comida? ¿qué me dices de la comida? Echarás de menos el pescado (¿dónde está el pescado fresco en Alemania?), la verdura (¡quién me iba a decir a mí que echaría de menos el cardo de Navarra!), y los dulces.... Bueno, esto último no, la verdad que de esto los alemanes ¡sí que saben!

Echarás de menos el sol. Y un clima más cálido.

11.- Sí, el Orgasmus existe

¿Pero no has dicho 10 razones?

Sí, lo sé. Pero sé que estábais esperando esta razón. Y sí, el orgasmus tiene bien puesta su fama.

Todo lo que pasa puede simplificarse en una sencilla ecuación.

Y, sin duda, todos los argumentos que apoyan este post es que ¡NINGÚN ERASMUS QUIERE VOLVERSE!