Aunque muchas personas nunca hayan oído hablar de él, el camino de Santiago Baztanés sonaba en mi cabeza desde hacía tiempo. ¿Por qué? Porque es un camino de Santiago que, aunque empieza en Francia, es recorrido casi íntegramente en Navarra, es relativamente corto (110 kilómetros) y, por lo que tenía entendido, bastante solitario por lo desconocido. Además, como navarrica, conocía algo la zona del Baztán (aunque hacía años que la tenía algo olvidada) y sabía con certeza que no me iba a defraudar.
Este agosto parecía el momento perfecto: regresaba de un viaje de cuatro meses por los Balcanes con mil preguntas, mil sentimientos mezclados y muchas ganas de conocer las montañas que tenía más cerca, por lo que empezar con un terreno menos exigente con el que acostumbrarme al peso en mi espalda parecía un buen plan.
¿POR QUÉ HACER EL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS AL REVÉS?
Cargada mi mochila con la tienda de campaña, el saco de dormir, la esterilla, comida (y todo lo que supone la posibilidad de acampada libre) mi plan era ir hacia el Pirineo navarro, por lo que le encontré sentido empezar desde Pamplona (más cerca de mi casa) e ir hacia el norte. Además, siendo agosto, no sabía cómo de concurrido me iba a encontrar el Camino de Santiago Baztanés y, para ser sincera, no quería grandes aglomeraciones.
En el puerto de Belate hay un trozo precioso de calzada romana
También, como mi plan era meterme más en las montañas, la idea era ir acostumbrándome más a caminar sin tanta ayuda extra (los caminos de Santiago están demasiado marcados y el camino de Santiago Baztanés no es ninguna excepción) y comprobar si la aplicación de mapas que utilizo en el móvil era suficiente.
Sí, volvía a utilizar el Camino de Santiago como prueba piloto: utilicé el Camino de Santiago francés para ver cómo era eso de viajar sola (antes de mi primer viaje sola) y utilicé el Camino de Santiago del Norte para ver cómo me sentía acampando sola.
GENERALIDADES DEL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS
El camino de Santiago Baztanés comienza en Bayona, Francia, para cruzar por el paso fronterizo de Ainhoa y llegar al bonito pueblo de Urdax, famoso por su monasterio (un enclave perfecto para el albergue de peregrinos), sus cuevas y las también cercanas cuevas de Zugarramurdi (conocidas por las celebraciones paganas llevadas a cabo allí y más tarde acusadas de brujería).
Urdax fue también el destino final de mi andadura, ignorando a propósito el tramo francés. Hablando con otros peregrinos que empezaron en la parte francesa no hubo un consenso acerca de este recorrido; algunos de ellos me decían que merecía mucho la pena mientras otros contaban mayoritariamente cosas negativas, lo que sí todos coincidían es que el camino de Santiago Baztanés está mucho peor marcado en su parte francesa y que ésta no cuenta con una buena infraestructura de albergues públicos para peregrinos (teniendo que pagar en todos los casos un albergue privado).
Señales en el Camino de Santiago Baztanés
En su parte navarra, que es la que yo conocí, el camino de Santiago Baztanés está muy bien marcado (a veces incluso demasiado), es bastante solitario y muy bonito. Era agosto, pero en los albergues al final del día apenas nos reuníamos más de siete (a excepción de Urdax, en el que me crucé con todo un grupo de 40 jóvenes que lo hacían como actividad de catequesis).
EL ENCANTO DEL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS
Los paisajes cambian continuamente según cambias de valle aunque las grandes casonas blancas de piedra y teja roja se mantienen como una constante, así como el verde en todas sus gamas. En mi opinión, el valle más bonito fue el que da nombre al camino, el Baztán.
Cuando crucé el puerto de Belate (sin duda mi etapa favorita que me llevó de Olagüe a Berroeta) y me adentré en soledad en su bosque, la niebla se colaba entre las copas de los árboles, la oscuridad ganaba pese al sol que brillaba en el exterior y tenía una sensación (bella, que no aterradora) de sentirme vigilada. Entendí entonces cómo en esta tierra siempre se habla de lamias, el basajaun o las brujas, seres mágicos que los niños desde pequeños saben que habitan los bosques y cómo Dolores Redondo pudo inspirarse en esta tierra para escribir su trilogía.
Tras la ascensión al puerto de Belate, me sumía en los oscuros, verdes y mágicos bosques del Baztán.
La vaca que (no) ríe
Cada día amaneció nublado, con las nubes estancadas en el valle, con ambiente húmedo y amenaza de lluvia, haciendo que yo, con mi pereza y soledad, me plantease cada día las ganas (o no) de salir a caminar y tener que vencerla. El sol saldría, al final, todos los días, ofreciendo otro color, un brillo y una alegría que, por haber estado privadas de él, era más valorada. La fresca llegaría todas las noches haciéndote agradecer esa chaqueta que echaste en la mochila.
Disfruté tanto el camino (e iba tan cargada) que me sentí tentada de hacer menos kilómetros diarios y alargar el viaje haciendo más paradas. Me gustaban los pueblos a los que llegaba, las piedras, las flores y la historia que se respiraba. Tenía tiempo y mi camino no era ningún desafío deportivo así que decidí dejarme llevar por la tentación; hice cinco etapas en lo que (la mayoría) de gente hace en tres y las guías recomiendan en cuatro. Como siempre pasa en estos casos, no me arrepiento, aunque soy consciente de que son muy pocos kilómetros diarios para alguien acostumbrado a caminar.
Eguzkilore, la flor que protege de los misterios de la noche a los vascos (lee aquí la preciosa historia)
Olagüe, mi primera parada en el camino de Santiago Baztanés
Si algo me gustó, además, del camino de Santiago Baztanés fue el poder introducirme de lleno no sólo en la naturaleza sino también en la historia del reino de Navarra; cruzando pueblos como Elizondo y Amaiur, donde todavía quedan resquicios de una antigua fortaleza que está en proceso de restauración y un monolito que conmemora el último foco de resistencia del Reino de Navarra frente a la conquista por parte de la corona de Castilla o la posibilidad de ver algunos de los búnkeres que construyó Franco a lo largo del Pirineo para evitar una hipotética invasión francesa tras la guerra civil. (Aquí tienes un artículo con más información).
Bunker de la época de Franco en el Pirineo Navarro
RESPONDIENDO PREGUNTAS SOBRE EL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS SOLA (Y AL REVÉS)
¿ES PELIGROSO HACER SOLA EL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS?
No creo, para nada, que sea peligroso hacer sola el camino de Santiago Baztanés. Eso sí, es bastante solitario por lo que tendrás que sentirte bien en la soledad de la naturaleza. A pesar de hacerlo al revés, no me crucé con mucha gente (creo que fueron cuatro personas el día en el que me crucé con más gente) y, como decía antes, en los albergues de peregrinos no estábamos más de siete personas.
Almuerzo solitario en el antiguo (y abandonado) hospital en el puerto de Belate
En todos los albergues del Camino de Santiago Baztanés conocí gente con la que compartir tiempo, experiencias e ideas. Aquí con la genia de Ione.
¿ESTÁ BIEN PREPARADO "LOGÍSTICAMENTE"?
El camino de Santiago Baztanés (en la parte navarra) está muy bien marcado con flechas amarillas. En cada etapa se cruzan varias fuentes (por lo que no hay problema de provisión de agua) y varios pueblos, aunque muchos de ellos, por lo tranquilos y apagados, parecen pueblos fantasma y no es posible encontrar una tienda o un bar en el que comprar comida o una cerveza.
Uno de estos casos es Berroeta (normalmente un final de etapa) por lo que te recomiendo que siempre lleves algo de comida en tu mochila (o no tendrás nada donde comprar cena) o en Olagüe, donde la tienda abre de 19:00 a 20:00 (y también a la mañana).
Antiguo hospital de peregrinos
¿PUEDO DORMIR EN LOS ALBERGUES DE PEREGRINOS SI HACES EL CAMINO AL REVÉS?
Yo no tuve ningún problema. Nadie me cuestionó de dónde venía o hacia donde iba. Tendrás que conseguir una credencial (imagino que se encuentran en Bayona o Urdax), aunque yo la conseguí en la Librería Diocesana de Pamplona (al lado de la catedral).
En caso de que algún albergue de peregrinos me hubiese planteado dudas o problemas, tenía la historia preparada de que mi intención era llegar hasta Bayona para ir hasta Irún desde donde tomar el camino de Santiago del Norte.
¿DÓNDE PUEDO ENCONTRAR MÁS INFORMACIÓN SOBRE EL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS?
Yo siempre utilizo esta página. Es muy completa, te divide las etapas y tienes toda la información necesaria. En el caso del camino de Santiago Baztanés tengo que decir que estaba algo desactualizada (sobre todo en lo relacionado a tiendas y albergues) pero aún así es muy útil.
En mi caso, al hacer el camino de Santiago Baztanés al revés, también utilicé una app móvil que me salvó en un par de ocasiones en el que las que perdí las flechas en algún momento. Esta app se llama Maps.me es gratuita y me encanta. Eso sí, tienes que descargarte los mapas de las diferentes zonas para poder moverte por el mapa.
¿QUÉ LLEVAR EN TU MOCHILA PARA EL CAMINO DE SANTIAGO BAZTANÉS?
En realidad, las cosas a llevar en tu mochila para este camino no difiere demasiado de lo que llevar en otros caminos. Sin embargo, remarcaría la necesidad de llevar ropa para la lluvia (son valles en los que acostumbra a llover), unas buenas zapatillas y uno o dos palos para caminar o ahuyentar algún perro que protege su terreno (hubo un caso en el que me dieron un buen susto). No infravalores la fresca del verano navarro, a las noches la chaqueta es más que necesaria. Además, y como he dicho antes, algo de comida para cocinar por si encuentras pueblos sin tiendas donde comprar.
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Hola Patricia¡ ¿llegaste a utilizar la tienda de campaña? ¿Es aconsejable cargar con ella? Un besazo
Hola Pepe! Es aconsejable cargar con la tienda de campaña sólo si disfrutas de acampar. En mi opinión y en mi caso, es mucho peso y hay albergues (a 6 euros) en suficientes etapas como para planificar el camino por lo que mi respuesta es no 😀