No tenía muy claro si nos dejarían cruzar a Tanzania. Estaba nerviosa. La frontera de Isebania con Sirari era mi primera frontera terrestre en África, llegábamos sin visado y en plena explosión europea del Covid. Sin embargo, fueron los oficiales keniatas los que nos detuvieron alegando que teníamos problemas con el visado de Kenia. Supe entonces que tendría para escribir este artículo, cuando nos negaron el paso, nos metieron en un cuarto y nos amenazaron con una gran multa.

Así me pasa ahora, que allí donde la gente ve problemas yo pienso en historias para contar. Y oye, no sabes lo mucho que ayuda a sobrellevar los (malos) momentos.

CRUZAR LA FRONTERA DE KENIA A TANZANIA

Nunca me han gustado demasiado las fronteras. He escrito varias veces sobre ello. Me parecen corruptas, por experiencia, ya que no son en pocas en las que me han intentado cobrar de más o sacarse un sobresueldo. En ellas me siento pequeña, indefensa y, sin motivos para ello, como una delincuente. Los pueblos que las rodean siempre son raros, con mucho movimiento y mucho buscavida.

Isebania, el pueblo en el lado keniata, no era ninguna excepción. Dormimos allí, a la mañana cambiamos cincuenta euros a dólares y cruzamos los dedos para que, de esta forma, no nos pusieran ninguna pega en la expedición del visado on arrival de Tanzania.

Aún así, tenía serias dudas de que pudiésemos pasar ese mismo día a Tanzania. No sólo no llevábamos el visado tanzano gestionado previamente, si no que, además, estábamos en plena explosión europea de Covid. Éstos eran demasiados flecos sueltos que podían llevarnos a tener que dormir de nuevo en Isebania.

Sin embargo, fueron problemas con el visado de Kenia los que casi nos dejan varados entre fronteras.

MIS PROBLEMAS CON EL VISADO DE KENIA

El primer paso en la frontera terrestre de Kenia es enseñar el justificante de vacunación para la fiebre amarilla, que es necesario para entrar en Tanzania si provienes Kenia.

Mientras lo buscábamos entre nuestros documentos, nos informaron de que, en el caso de no tenerlo, existía la posibilidad de vacunarnos ahí mismo (creo que rondaba los 50 dólares) o, en el caso de haberlo olvidado o perdido, podíamos pagar una pequeña suma (no recuerdo bien pero rondaba los 30 dólares) con la que nos proveerían de él (sin necesidad de vacuna y confiando plenamente en la palabra del que cruza la frontera). Como os decía, todas las fronteras buscan la forma de sacarse un dinero extra.

Después, pasamos nuestras pertenencias por los rayos X y a la hora de enseñar nuestros pasaportes al oficial vimos que teníamos problemas con nuestro visado de Kenia, ya que el militar llamó a dos oficiales que nos abrieron la puerta de un cuarto y nos hicieron pasar.

Oh, oh.

El señor, tomando el pasaporte de mi hermano y señalando un número que bien podían ser letras, dijo que se nos había concedido un mes de visado y que habíamos excedido en 21 días nuestro visado de Kenia.

Llevábamos casi dos meses en Kenia pero habíamos solicitado por internet el visado para tres meses y nos lo habían concedido.

No entendíamos nada.

Le enseñamos el papel impreso que justificaba que nos habían aceptado el visado de Kenia y, en un punto en letra pequeña, nos mostraron que estaba escrito que el tiempo ofrecido dependería del oficial de frontera una vez llegásemos al aeropuerto.

Nadie nos había dicho nada de eso.

En el aeropuerto, nadie nos informó ni especificó que sólo nos estaban dando un mes de visado para Kenia. No nos dieron ningún recibo, no plasmaron ninguna fecha en nuestro pasaporte.

Recordé al señor que me interrogó (poco) en el aeropuerto, recordé la sonrisa, el guiño de ojo y el levantamiento de cejas. Su "Karibú Kenya". Busqué mi sello del visado de Kenia en mi pasaporte. En mi sello, el IM era irreconocible. Me aferré a ello, a cómo yo, si nadie me decía nada, si no tenía recibo de nada, iba a entender que eso quería decir un mes. Además, IM bien podía significar Immigration. Nada tenía sentido.

Nos dijeron que esa ilegalidad nos supondría más de 500 dólares a cada uno. No era la primera vez que se enfrentaban a algo así y a mí me olió a que era una trampa preparada.

Nos empeñamos en que no. No había hecho nada malo y estaba segura de ello.

Nos amenazaron con ir a juicio por los problemas en el visado de Kenia si no estábamos dispuestos a pagar la multa. Eso era ir demasiado lejos. Contestamos que estábamos seguros de que ganaríamos, no estaba segura de que fuese legal que no nos hubieran dado un recibo y que en nuestro sello no hubiese marcada una fecha (siempre la hay). Con seguridad (y una tranquilidad que, ahora, no sé de dónde salió) dijimos que si así lo querían , así sería.

Mostrando mucho enfado (sobre todo la mujer que tenía mayor cargo) cerró los pasaportes, repitió que la multa hubiera sido 500 dólares por persona y que tuviésemos mucho cuidado la próxima vez.

- No lo dude, lo tendré. (Y avisaré a cualquier persona que quiera hacer un viaje de más de un mes en Kenia).

Salimos y, después de esto, la frontera de Tanzania nos pareció de lo más sencillo. Nos lavamos las manos más de tres veces, nos midieron la temperatura (ignoraron mis 37,8º y los 32,8º de mi hermano) y pagamos los cincuenta dólares de visado. Nos sellaron el pasaporte, esta vez con fecha de expiración, y nos dieron un recibo (también con fecha de expiración).

Y respiramos. Ya estábamos en Tanzania después de los increíbles problemas con el visado de Kenia que podían habernos costado más de mil dólares.

CÓMO HACER EL VISADO DE KENIA

Hay tres formas diferentes para conseguir el visado de Kenia. Cada una con un precio y adaptada a un nivel de seguridad o de confianza. Entonces ya decides tú dónde te encuentras más cómoda:

La forma jugona de conseguir el visado de Kenia

Según vimos cuando llegamos al aeropuerto, el visado de Kenia puede hacerse on arrival. Es decir, puedes llegar al aeropuerto de Nairobi (por ejemplo) y solicitarlo. Nosotros vimos gente que lo hacía así.

Si no recuerdo mal, pero puedo recordar mal, el visado allí costaba 50 dólares o 40 euros (por lo que nos hubiese salido mucho mejor de precio esta opción).

Sin embargo, es demasiado jugón para mí volar sin visado (las aerolíneas a veces pueden ponerte pegas) ya que no tienes las seguridad de que una vez allá puedas entrar.

La forma digital autogestionada de conseguir el visado de Kenia

Es la forma que yo utilicé.

Puedes conseguir el visado de Kenia a través de la página gubernamental. Es segura ya que es del propio gobierno, pero está en inglés y se hace el pago en la aplicación del visado, independientemente de que te la aprueben o no.

Es necesario hacerse una cuenta y la comunicación posterior deja un poco que desear, por lo que tienes que entrar durante los días posteriores para comprobar si tu visado ha sido aceptado o no. Una vez ha sido aceptado, tarda unos días, tendrás que imprimir el justificante para mostrarlo en la aduana de Kenia.

El precio son 51 dólares (no hay posibilidad de pagar en euros) más las comisiones propias de cada banco por el hecho de pagar en moneda extranjera.

La forma segurelas

A través de una agencia. Te piden unos datos, todo se realiza en español, pagas y ellas se encargan de todo.

Cuando tu visado ha sido aprobado te mandan el link a tu e-visado que deberás imprimir para enseñarlo en el aeropuerto. Tener una compañía de habla hispana detrás siempre da más seguridad.

El precio total de visado más gestiones con una agencia como e-visado es de 74'95 euros.

MÁS INFORMACIÓN DE INTERÉS

Elijas el método que elijas, esta página suya contiene muy buena información para resolver dudas básicas.

En este link puedes encontrar el resto de fronteras existentes entre Kenia y Tanzania y mucha información de utilidad. Según dicen otros viajeros, la frontera de Isebania- Sirari es una de las más pesadas, aunque imagino que es por su localización, ya que es la que más al oeste está, pero también es la más cercana al lago Victoria. Dependerá de tus planes para visitar el país, a mí la zona me ENCANTÓ.

¿Has viajado a Kenia? ¿Has tenido problemas con el visado de Kenia o con algún otro tipo de documento en otro país? ¡Cuéntame!