Hace unos días, en un artículo del Huffingtonpost leía un post de Adi Zarsadias, viajera y escritora, que se titulaba "Don't Date a Girl Who Travels". Es decir, no salgas con una chica que viaja.
El post, aunque escrito de forma algo irónica, ha causado bastante revuelo. ¡Y es que sólo un chico que está loco saldría con una chica viajera! Las viajeras son tan difíciles de complacer y sorprender que no alucinarán con tu caro reloj, no querrán salir de fiesta porque querrán ahorrarlo para su próximo vuelo, piensan continuamente en dejarlo todo, no quieren trabajar como un robot, saben cocinar, son independientes ¡y no llevan reloj!
¡¡¡Que alguien las detenga!!! ¡No llevan reloj!
Y la respuesta tardó poco en llegar. Stephanie Ridhalgh, no dispuesta a verse sola años después con la única compañía de sus gatos, escribió otro artículo en que explicaba las razones por las cuales SÍ deberías salir con una chica que viaja.
Por qué sí salir con una chica que viaja
Son menos materialistas: No le importa las posesiones sino las experiencias atesoradas. No necesitarás comprarle regalos caros, con fotos con las que recordar los momentos será suficiente.
Disfruta de su hogar: Valora su tiempo en su ciudad natal y le gusta escuchar sobre la normalidad, y se siente orgullosa cuando alguien visita su ciudad.
Una viajera cuando llega a casa después de mucho tiempo viajando...
¡Una ducha! ¡Y toallas limpias!
Es muy trabajadora: no le importará trabajar en dos o tres trabajos al mismo tiempo si le permitirán costearse sus aventuras. Además, sabe que las empresas buscan perfiles como el suyo para trabajar con ellos.
Sabrá sorprenderte: Sabe moverse por ciudades desconocidas y sabe disfrutar de verse perdida.
Es tolerante y se sabe adaptar: Ha perdido tantos vuelos, ha sufrido retrasos, ha comido comida de tantos puestos callejeros que sabe cómo adaptarse a cada situación.
Sabe dar apoyo y comprensión: Es consciente de que puede que no viajes con tanta orientación como ella, pero siempre lo hará divertido. Toma lo que la vida le ofrece y te ayudará a hacer lo mismo. Además, aguantará los ronquidos porque ha dormido en hostales con habitaciones de ¡hasta 20 personas!
Sabrá cómo impresionar a tus padres: Está acostumbrada a hablar con extraños y sacar conversación. Estará abierta a conocer a nueva gente e impresionar a tus amigos.
Es independiente, lista y fuerte: Tiene que ser autosuficiente. Sabe mirar presupuestos y ahorrar dinero.
Ahora sólo te queda unirte a ella la próxima vez y ¡disfrutar!
Así que ya sabéis chicos: SÍ a salir con una chica viajera.
De la curiosidad al asentimiento, que razón tienes. Pienso que trotamundos y nómadas digitales por lo general reúnen características realmente interesantes.
Me alegro de que lo pienses Juan! Un abrazo!